jueves, 12 de enero de 2012

NUEVO RELATO. "EL DESVÁN DE LAS VANIDADES"


“CAPITULO Nº 1 (Continúa en comentarios)


…- Vuelva a su asiento, quizás no haya sido una buena idea levantarse de su cama en el día de hoy. Para hacer el ridículo de esta manera, mejor se hubiese quedado acostado. Nos ha hecho perder el tiempo tanto a sus compañeros como a mí. Le exijo una disculpa, y que haga el favor de volver a su asiento.- indicó, el profesor a Daniel Orbegozo, ante la risa generalizada de sus compañeros.-

Daniel, hijo único del potentado empresario madrileño, Silvestre Orbegozo, cursaba su último año de estudios de la carrera de periodismo en la Complutense de la capital de España. Su expediente, inmaculado hasta los compases del curso anterior, se estaba viendo en la actualidad salpicado por los errores continuados que estaba cometiendo en su vida personal.

A punto de cumplir sus veintitrés años, Daniel, aparcó su pasión por el deporte por demostrar a su padre que era capaz de tener una carrera antes de cumplidos los veinticinco. Pese a negarse a estudiar ciencias empresariales o derecho, como deseaba su progenitor para adentrarlo en su emporio, consiguió convencerlo de que primero estudiaría algo que le gustara realmente, y que para su tranquilidad posteriormente realizaría un buen master que le permitiera cobijarse bajo sus alas protectoras, aunque no fuera esa realmente su intención. Lo que deseaba era estudiar periodismo, conseguir el mejor expediente, y ejercer después la profesión que desde pequeño había despertado su verdadera vocación. La investigación y la escritura, eran realmente su pasión desde su infancia. Novelas, películas, artículos de prensa des veladores… permanecían amontonados en su habitación desde siempre. Para poder conseguirlo, Daniel, se sometió a la rectitud dictatorial de su padre, que desde su primer curso universitario lo obligó a salir de casa para compartir piso con un primo suyo venido de Asturias, para estudiar Derecho. Su primo, Carlos, hijo de una prima hermana de su padre, algo mayor que él, procedía de una parte de la familia, digamos que más humilde por no decir del ala pobre de los Orbegozo. Daniel, percibía lo justo para poder pagar los gastos compartidos del piso y poco más para sobrevivir. –Tienes que saber ganarte la vida desde abajo, como hemos hecho todos los Orbegozo.- le dijo su padre al comenzar la carrera.

Pero, pronto descubrió Daniel, que todo aquello no era más que parte de un montaje para llegar a librarse de él. Silvestre Orbegozo, tras separarse de la madre Daniel, al abandonarlos ésta para escaparse junto a un reputado director de orquesta austríaco, cuando su hijo no tenía más de catorce años, comenzó una nueva vida junto a Rosa Alberca, mucho más joven que él, y que hasta entonces había sido su fiel secretaria. Durante los años en que Daniel cursó bachillerato y estuvo compartiendo casa junto a ella, la convivencia se fue convirtiendo poco a poco en una batalla campal en la que su padre siempre parecía tomar partido por la nueva señora de la casa, pero pese a ello, los continuos viajes que realizaban su padre y su madrastra, le sirvieron para soportar estoicamente hasta llegado el momento de comenzar en la Universidad.


Al finalizar las clases, Daniel, salió de la universidad con el tiempo justo para acudir a la cita con su primo Carlos, en uno de los bares más cercanos a la Complutense. Allí, lo esperaba éste acompañado por dos compañeras para tomar café y hacerle una propuesta que comenzaría a cambiar su vida para siempre…”

72 comentarios:

Mary dijo...

Aqui estoy, de tu brazo," EL DESVÁN DE LAS VANIDADES", un titulo que me da mucho que pensar,venga¡¡¡¡¡ sorprendeme por favor.

Gracias,me lo tomo como un bonito regalo para olvidar el día y empezar mañana con nuevas aventuras,¿que más puedo pedir hoy?,

Un bacio.

asun dijo...

Buenooo, sin terminar aun de digerir el pintor nos sumergimos de nuevo el otra aventura, que solo con el titulo ya me pone alerta Di que si Tomas, sin epidural ni na, Estoy preparada otra vez muxus

Melek dijo...

Día tras dïa me sosprendes, aquí volvemos a emprender una nueva aventura junto a ti. Un abrazo

PD. ¿Tú mente descansa?

Dogoan dijo...

¡¡ pero bueno tu no te ibas a tomar unos dias de descanso campeón !!
pero si no acabamos de digerir todavía el pintorcito, chato, ya te vale, bueno pues ná, comenzamos de nuevo eah.

no esta mal el comienzo, pinta bien estas vanidades.

annasunn dijo...

Bueno aqui me tienes a la espectativa,ahora a cambiar el chip para adentrarnos en una nueva historia.
Besos.

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 2



…- Daniel, te presento a unas amigas mías, Laura y Manuela.-indicó, Carlos.-
- Encantado.-contestó, besándolas.-
- Como os he dicho, chicas, mi primo es ese otro hombre de los que ya quedan muy poco.-añadió, Carlos, sin que Daniel, aunque sonriente, pudiese adivinar por que camino iba a tomar su primo.- Querido, primo, Laura y Manuela, se vienen a vivir con nosotros. Serán, nuestras nuevas compañeras de piso.

Daniel, quedó estupefacto ante las palabras de Carlos, las jóvenes, al ver como cambió su semblante, se excusaron para ir al servicio, mientras, Carlos, cambiaba de asiento para estar más cerca de él. Laura y Manuela, era dos mujeres muy bellas, que a pesar de su juventud, transmitían una madurez aventajada con respecto a aquellos dos estudiantes universitarios.

- ¿Pero que te pasa, primo? ¿No ves como están? , guapas, preparadas, simpáticas… Ya lo habíamos hablado…
- ¿Hablado? Dijimos que intentaríamos encontrar dos compañeros de piso para compartir gastos…
- ¿Y no son mejor compañía estas dos compañeras?
- ¿De donde han salido? ¿Son compañeras tuyas de clase?
- ¿Pero qué dices? ¡Ojala estuvieran en mi clase! Las conocí hace unas semanas…
- ¿Las conocisteis hace unas semanas y ya les propones que vivan en casa con nosotros? ¿De donde han salido? ¿Qué sabes de ellas? ¿Por qué diablos no me has consultado antes?
- Calla, calla, que ya vienen ahí.-contestó, Carlos, queriendo que disimulara ante la llegada de las dos chicas.-
- Pero…
- Nada, nada confía en mí.

Carlos, había conocido a las chicas hacía un par de semanas en la discoteca “Garamont”. Allí, una de las noches que el primo de Daniel, solía salir de copas la noche de los viernes, congeniaron rápidamente en la pista de baile, para más tarde charlar animosamente sobre a lo que se dedicaban unos y otros. Laura y Manuela, eran naturales de Valencia, y trabajaban en la capital de España, para una prestigiosa firma de modelos. Tras confesarle que llevaban poco tiempo en la Ciudad, y que andaban algo perdidas buscando un alojamiento mejor que la habitación que tenían alquilada en las cercanías de la calle Montera, Carlos, les prometió hablar con Daniel, para buscarles acomodo en su piso.

- ¿Y bien? ¿Tenemos sitio en vuestra casa o no? –preguntó, con desparpajo Manuela, que parecía llevar la voz cantante.-
- Verás…-intentó decir, Daniel.-
- Claro que sí, ya os dije que con mi primo no ibais a encontrar tampoco problemas.-aclaró, Carlos, mientras Daniel, clavaba sus ojos en él, mordiéndose los labios.- Esta misma noche os podéis mudar.-añadió.-
- ¿Esta noche? , pero, ¿donde van a dormir? –preguntó, Daniel, enarcando las cejas.-
- Daniel, esta noche pueden dormir en mi habitación, y yo dormiré contigo. Ya preparemos con más tiempo la habitación que tenemos vacía…
- Si es un problema podemos esperar…verá…-señaló, Laura.-
- ¿Pues no has oído a Carlos? Son primos, tampoco creo que Daniel, tenga problemas en ello.-dijo, Manuela.- Chicos, os lo agradecemos. No sabéis lo que es dormir una noche más en esa pocilga de pensión.-añadió.-
- ¿Entonces, Daniel? –preguntó, Carlos.-
- Está bien, pero tenemos que hablar detenidamente de las normas de convivencia.-contestó, Daniel.-
- Claro, hombre. Seguro que no tenemos ningún tipo de problemas en convivir con estas dos bellezas.-señaló, Carlos, clavando sus ojos en Manuela, con sonrisa picarona.-…”

Mary dijo...

Empezamos con conflictos,esto promete,voy a esperar acontecimientos,dos estudiantes,dos modelos,vamos haber que pasa....

Un bacio.

susy dijo...

Venga que este relato no me lo pierdo...ME GUSTAAAAA!!!!!

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 3



…La convivencia, para sorpresa de Daniel, fue desarrollándose durante las primeras semanas de manera más que cordial pese a los extraños horarios que habitualmente mantenían Laura y Manuela. Al regreso de la Universidad, cada día, las jóvenes salían para realizar bolos o trabajos destinados en promocionar diferentes marcas de bebidas por discotecas y salas de moda en la capital de España, y durante el día, combinaban sus estudios de pasarela con mantener el piso en perfecto estado de revista. Carlos, se vanagloriaba ante él por haberlas encontrado para compartir la vivienda con ellos, sin que Daniel, pudiese objetar el más mínimo detalle en contra de sus nuevas compañeras de piso.

- ¿No tienes nada que decirme?
- ¿Qué quieres que te diga, Carlos?
- Mira.-indicó, enseñándole un fajo de billetes.- Nuestras compis, han cumplido con las normas que estableciste cuando se mudaron con nosotros. Aquí tienes los dos meses de fianza, que les exigiste.
- Era lo que debíamos hacer.-justificó, Daniel.- lo hace todo el mundo por amor de Dios.
- ¿Y el piso…? No ha estado esta pocilga tan limpia en la vida.-dijo irónicamente Carlos.-
- ¿A dónde quieres llegar?
- A que me reconozcas que fue un acierto el dejarlas vivir con nosotros.
- ¡Joder, Carlos! Necesitas continuamente…
- ¿Qué me digas que tomo las decisiones más acertadas? Sí, eso es lo que deseo oír. –preguntó sonriendo.-
- Si, necesitas que te alaben y reconozcan cada paso que das, y hay que ser un poco más humilde.-protestó, Daniel.-
- Óyeme, primo, estoy a punto de terminar la carrera de Derecho, y no voy a ser un picapleitos más. Carlos Cruz Orbegozo, será un abogado de prestigio. Un letrado, al que todos admiraran, y a los que la mayoría injuriaran, pero no pasaré sin pena ni gloria arrastrándome por despachos añejos y dedicados a defender de oficio.-explicó, Carlos.- ¿Y todo porqué? Por lo que te estoy diciendo, porque voy a exigir que se me reconozcan mis méritos y aciertos. Quiero…que la gente valore mi trabajo y las decisiones que tome en cada momento.-añadió.-
- ¿Y vas a empezar a defender tu estatus profesional, queriendo que te reconozca la elección de nuestras compañeras de piso? No me hagas reír, tú estas mal de la cabeza, Carlos… pon los pies en el suelo y céntrate como bien dices en terminar la carrera este año que ya va siendo hora.-contestó, Daniel.-
- Ríete, pero ya me entenderás y tendrás que respetarme como los demás. Hasta puede que te vea suplicar el que te conceda una entrevista cuando seas periodista.
- ¿Tan alto llegarás? –preguntó, aguantando la risa, Daniel.-
- Esa no es la pregunta, primo. Más bien sería… ¿Tanto prestigio me daría el conseguir entrevistarte? Esa sería la pregunta.
- Está bien. ¿Me dejas que continué estudiando para prepararme ese momento?

En el punto más álgido de la conversación, en la que Carlos, parecía ya verse convertido en el rey de la abogacía, llegó, Manuela, con mucha prisa para encerrarse en su habitación. Apenas reparó en saludarlos antes de dar un fuerte portazo.

- ¿Has visto? ¿A que viene ese portazo? –Preguntó extrañado, Carlos, mientras Daniel, levantaba su cabeza de los apuntes.- ¿Qué hará aquí? ¿Y Laura? –añadió extrañado al verla regresar tan temprano.-
- ¿Qué te resulta extraño? ¿También tendrán sus vidas, no crees? Habrá terminado antes, y tal vez Laura, se haya quedado por ahí tomando algo.
- No me seas pardillo. Manuela, nunca se ha comportado tan fría con nosotros, o al menos conmigo. Estas dos han discutido o algo más fuerte.-aseveró, Carlos.-
- Lo tuyo es de siquiatra, sino vas a estudiar vete a dormir, pero déjame concentrarme que mañana tengo un examen.

Carlos, se acercó sigilosamente hasta la puerta de la habitación de las chicas y pegó su oreja. Manuela, parecía mantener una acalorada discusión por teléfono que apenas conseguía entender. Daniel, lo miró desde la mesa de estudio del salón recriminándole su comportamiento, pero su primo, le hizo un gesto negativo con la mano mientras intentaba agudizar su oído para conseguir enterarse de algo…”

Mary dijo...

Ya empezamos con comportamientos mosqueantes, me gusta la aptitud de Daniel....Venga Maestro danos motivos para empezar a mordernos las uñas.

Un bacio.

susy dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Melek dijo...

Empieza la trama.......que cotillas que son los hombres despues dicen de nosotras,ja,ja,ja
Un abrazo

Dogoan dijo...

empezamos bien,¡¡problemas a la vsta!! no me gustan estas dos...

susy dijo...

Huy estas dos aparte de modelos son otra cosa.no sé , no sé.

asun dijo...

Se le tenia que quedar la oreja pegada en la puerta, jajaja que ponga los codos en la mesa como su primo, eso es lo que tiene que hacer: a estudiar cotilla

samara dijo...

me gusta este relato, esperando el cuarto capítulo

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 4



…Amaneció, y Daniel y Carlos, estaban a punto de marchar camino a la Universidad. Laura, no había vuelto a casa según confesaba Daniel a su primo mientras apuraban una taza de café en la cocina.

- Ya te dije que algo había sucedido entre esas dos.-aclaró, Carlos.- No pude escuchar con quien discutía, pero Manuela, estaba demasiado excitada anoche.-añadió.-
- Quizás se quedara a dormir en casa de alguien…
- ¿Tú estás seguro de que no regresó?
- Carlos, he estado estudiando hasta hace un rato, y ni la he visto entrar, ni Manuela, salió más de su habitación.-aseguró, Daniel.-
- Bueno…se hace tarde.

Daniel, marchó con la mente puesta en el examen al que estaba a punto de enfrentarse en la Facultad. Deseaba en el fondo de su ser vengar la afrenta del profesor de dicha asignatura, que días antes lo ridiculizaba, sin motivo aparente ante toda la clase, mientras, Carlos, no dejaba de darle vueltas a la cabeza al asunto de las compañeras de piso. Se había convertido en su valedor para cobijarlas allí pese a que el fuera con otras intenciones, y ahora, le daba en la nariz que algo había detrás de aquél contratiempo de la pasada noche en la que una no había aparecido, y la otra discutía fuera de sí encerrada en su habitación, por lo que decidió desandar sus pasos y regresar al piso. Al fin y al cabo jamás había compartido con ellas las horas diurnas desde que aparecieran hacía unas semanas en sus vidas. Quizás de aquella manera pudiera aclarar sus sospechas.

Al llegar, todo estaba como lo habían dejado apenas unas horas antes. Los platos de la cena, aún sobre la mesa, el cenicero hasta arriba de colillas… y el silencio era absoluto pese a que el sol entraba con descaro por cada poro de la vivienda.- ¿Qué extraño?-se preguntó, Carlos.- Manuela, se había ido a su habitación…digamos que temprano, acostumbrada a lo que trasnochaba. Se había costado, tras mantener aquella acalorada discusión que parecía traerla boca abajo, lo que resultaba todavía más extraño, si cupiese. Realmente le sorprendía que aún no se hubiese levantado de la cama.

Dubitativo, se fue acercando hasta la puerta de la habitación de las chicas. Su corazón se aceleraba pensando que quizás estaba a punto de ir demasiado lejos atreviéndose a abrir a puerta. Pensaba que estaba a punto de violar la intimidad de sus compañeras solo por una corazonada. Quizás llevara razón, Daniel, y todo hubiese sido un mal entendido entre las muchachas, pero sin pensarlo mucho más, bajó lentamente la manilla cerrando fuertemente los ojos, como si de esta manera fuese hacer menos ruido. Empujó la puerta con suavidad y asomó su cabeza.

La habitación estaba completamente revuelta. Parecía que Manuela, se hubiera vuelto loca la noche anterior y hubiese tirado todas las ropas del armario por los suelos. Entre las dos camas, tendida sobre el piso, se encontraba la chica semidesnuda echa un ovillo. Junto a ella, un frasco de pastillas desparramadas hicieron presagiarle lo peor.

- ¡Dios Mío!-exclamó, corriendo hacia ella.-

Manuela, se encontraba con el conocimiento perdido.

- ¡Despierta, Manuela! ¡Despierta!.-le gritaba, dándole cachetadas en el rostro sin que esta reaccionara.-

Su pulso era débil, pero constante. Carlos, no podía adivinar cuantos “Tranquimazin”, faltaban en el frasco ni cuantos pudiese haber tomado, pero necesitaba tomar una decisión urgente para salvar la vida de Manuela…”

salmorelli dijo...

Bienvenida al blog, Samara, espero que nos acompañe letras y letras, con el resto de la family. Un beso, Tomás

Mary dijo...

Ay madre¡¡¡¡¡ ¿ y Laura?,¿y Daniel toda la noche estudiando y no escucho nada raro?...YA LO HAS CONSEGUIDO MAESTRO,INTRIGADISIMA¡¡¡¡¡

Un bacio

Pd.Samara bienvenida a este blog de locos.

asun dijo...

Que raro es todo esto, a mi tambien me huele a chamusquina
Bienvenida Samara, vas a disfrutar de lo lindo Muxus

susy dijo...

Esto promete...me gusta

samara dijo...

gracias por darme la bienvenida un bso para todos, cada vez se lia mas la cosa aver ke pasa en el 5º capítulo

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 5



… - Tienes que venir cuanto antes, ¿me oyes?
- ¿Te has vuelto loco, Carlos? Acabo de entrar en un examen. ¿Es que no lo puedo creer? –refunfuñó, Daniel.-
- Pues créetelo, esta chica se está muriendo, ¡Joder!-confirmó, Carlos.- Tenemos que hacer algo.
- Pues, avisa al 112 o has algo, ¿pero que voy adelantar yo? Óyeme, Carlos, el profesor…ese que me tiene marcado está a punto de repartir los exámenes, no me jodas, tío. Avisa a un médico.-contestó, Daniel.-
- ¡Por amor de Dios, Daniel! Esta chica se ha intentado suicidar, ¿Qué quieres hacer? ¿No sabes que nos podemos comer un marrón bien gordo nosotros?
- Señor Orbegozo, ¿no sabe que hay que prescindir del teléfono al entrar a un examen?
- Disculpe…
- ¡Daniel, Daniel! –gritaba, Carlos, tras colgar su primo.-

Carlos, arrastró a Manuela, hasta conseguir llevarla al baño para meterla en la bañera. Al contacto con el agua, más bien fría, la joven, comenzó a despabilar un poco.

- ¿Qué pasa? ¿Qué haces? –balbuceó, al ver a Carlos, arrodillado ante ella completamente desnuda.-
- Manuel, por amor de Dios, ¿qué has hecho tú?

Poco a poco parecía recuperar su pulso, aunque continuaba completamente dormida. Tras esperar un poco, la secó y la llevó en brazos hasta la cama. Poco después, Daniel, llegaba completamente acelerado, y al verlo sentado junto a ella montó en cólera.

- ¿Quién se estaba muriendo? –Gritó.- Me han expulsado de clase y me han prohibido hacer el examen. ¿Y que me encuentro aquí? A mi querido primo, a los pies de su doncella. ¡Eres un gilipollas! Eso es lo que eres.-añadió, furioso.-
- ¡He tranquilo! No te pongas así, que yo si que lo he pasado mal, ¿me oyes? –respondió, puesto en pie, con tono amenazante.- Y haz el favor de salir de aquí si no quieres que te de un sopapo.
- Carlos, no puedes…
- ¡Ni Carlos, ni gaitas! ¡Que le den por culo a tu puñetero examen! Esta mujer ha estado a punto de morirse si no me hubiera dado por regresar. ¿no lo entiendes?
- Esta bien.-suspiró, Daniel, reconociendo la gravedad del asunto.- ¿Y como está? ¿No sería mejor avisar un médico?
- ¿Qué hacéis aquí? –preguntó, de nuevo, Manuela, recuperando levemente la consciencia.-
- Manuela, tenemos que llevarte a ver un médico.-indicó, Daniel.-
- Dejadme en paz. Solo quiero dormir.-contestó.-
- Tranquilízate, Daniel, ya parece que esta bien. Lo único que sucede es que estará durmiendo hasta sabe Dios, cuando…
- ¿Y Laura? ¿Te ha dicho algo de ella?
- Nada, lo único que ha dicho es lo que has oído. De Laura, nada de nada. Intenté llamarla por teléfono, pero lo tiene apagado.
- ¡Joder! Estas dos están metidas en algo raro que te lo digo yo.-añadió, Daniel.-
- Lo que tiene es un cuerpo espectacular…
- ¡Carlos, por amor de Dios! Tú, siempre igual…
- Es broma. Desde luego no se te puede gastar ni una broma.-contestó, Carlos.- Dime, que pasará con tú examen.
- ¿Qué que pasará? , muy sencillo, se lo he puesto en bandeja para que termine de pasar por encima mía al cabrón ese.
- ¿Y qué tiene en contra tuya?
- Vete tú a saber. Se cree Dios, en la tierra…
- Callarse de una vez…-susurró, Manuela.-
- Venga, vamos fuera. Dejémosla descansar.-indicó, Carlos.-…”

Mary dijo...

Joder¡¡¡¡¡ vaya ratito y vaya marrón, aunque Carlos no pierde detalle,me sigue intrigando donde esta Laura.

Venga que ya toca, ¿sabes? progresas adecuadamente¡¡¡¡

Un bacio

samara dijo...

para mi ke estas dos estan liadas jeje aver ke pasa

Dogoan dijo...

bueno,bueno, expectante con estos primos, haber por donde salen, ellas un pelín oscuras, no se, no se.muy buena mezcla para un principio.




P.D.Bienvenida Samara

samara dijo...

gracias gonzalo

asun dijo...

Vale Tomas ya hemos despertado a manuela hace dias. ¿ Y LAURA DONDE ANDA? venga,venga, no te duermas en los laureles que nos tienes a la espera

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 6



…Carlos y Daniel, decidieron permanecer en su domicilio hasta saber que estaba sucediendo realmente con sus inquilinas. No se atrevían a dejar sola a Manuela, después de lo acontecido, e incluso barajaron de nuevo la posibilidad de avisar a un médico para que la revisara. Pasaron las horas, y al atardecer, al fin salió de su habitación, sin que aún se supiera nada sobre el paradero de Laura.

- Hola Chicos, ¿Qué tal? –preguntó, aún algo aturdida.-
- ¿Qué tal? –respondieron casi al unísono ambos muchachos.- ¿Nos estas preguntando tan tranquila? -Añadió, Daniel, tomando la iniciativa.-
- ¿Qué sucede? –volvió a preguntar Manuela.-
- Manuela, por amor de Dios, ¡te has intentado suicidar! –exclamó, Carlos.-
- ¿Suicidar? No digas bobadas.-contestó, con firmeza.- No podía conciliar el sueño y tome unas pastillas, solo eso.
- ¿Unas pastillas, dices? No lo puedo creer. Te habías tomado…quien sabe cuantas, si no es porque Carlos, te descubrió tirada en el suelo a saber si lo cuentas.-le reprochó, Daniel.- ¿Y Laura? ¿Dónde está Laura?
- ¡Eh! ¿qué es ese tono? ¿qué andáis vigilándonos? Laura, ha marchado unos días a su casa, pero ¿Qué significa todo esto? ¿Acaso andamos nosotras vigilando lo que hacéis? ¡Esto es el colmo! –contestó, Manuela, enfurecida al tiempo que sonaba su teléfono.- Disculparme un momento.-añadió, retirándose de nuevo a su habitación.-

Carlos y Daniel, no daban crédito a la reacción de Manuela. Encima, se permitía el lujo de reprocharles su comportamiento pese haberle salvado la vida.

- Esto es inaudito, pero ¿qué se ha creído esta tipa? -Exclamó, Daniel.-.
- Tranquilo, quizás hemos ido demasiado lejos.-contestó, Carlos.-
- No seas estúpido, Carlos, y pensar que he perdido el examen…

Manuela, salió de su habitación y les comunicó enfadada que ya terminarían aquella conversación en otro momento. La habían llamado para un trabajo y tenía que salir urgentemente.

- ¡Joder, Carlos!
- Te he dicho que te tranquilices.-insistió, Carlos.- No creas que me creo lo que nos dice. En cuanto salga por esa puerta voy a averiguar en que andan metidas estas dos.-añadió.-
- Lo que faltaba.-replicó, Daniel.- Lo que hagan o no hagan no es nuestro problema, en eso si que lleva razón. Ya son bastante mayorcitas, nosotros con no renovarles el acuerdo para que sigan viviendo aquí tenemos bastante.
- Bueno, chicos, me marcho.-dijo, Manuela, saliendo de su habitación encandilando a ambos primos con su atuendo.- Siento haberos preocupado, pero estoy bien, creedme.-añadió en dirección a la salida del piso.- ¡Ah! y no esperad Laura, estará unos días fuera de Madrid. –dijo, cerrando la puerta tras de sí.-
- ¡Esta buena la condenada! –exclamó, Carlos.- No se que piensas hacer tú, pero yo me voy detrás.
- Estás como una moto…
- ¿Te vienes?
- Está bien, Carlos, pero nada de locuras, ¿de acuerdo?
- No te preocupes, primo, es simple curiosidad.
- Pues la curiosidad mató al gato.-contestó, Daniel.- No pienso hacer el ridículo…
- Tranquilo, en cuanto sepamos por donde se mueven nuestras amigas, regresamos a casa.
- De acuerdo.

Y con la decisión tomada, bajaron rápidamente las escaleras para no perder la pista de Manuela. Al llegar a la calle, aún permanecía esperando en la esquina de la calle.

- Ven, tengo mi moto aparcada ahí mismo.-indicó, Carlos.-…”

Mary dijo...

La intriga estaba servida pero ahora requeteservida, haber ahora donde va esta,..... Daniel critica a Carlos pero siempre claudica y sigue sus pasos,es normal son hombres la curiosidad les pude y la verdad es que ami tambien,y Laura ¿¿¿en su casa en Madrid???? no se yo¡¡¡¡¡¡

Un bacio

asun dijo...

¿ Solo unas pastillas para dormir y casi la palma? que raro,

samara dijo...

uyy esto promete donde irá manuela y dónde estará laura ke intriga

Dogoan dijo...

A estas dos la noche las confunden, no son trigo limpio, a esos dos pringaos los van a meter en un lio de narices, si no tiempo y vereis...


Hermano me empieza a tirar, veremos a ver... Un abrazo Campeón.

susy dijo...

Venga Tomás que me enfrioooooo!!!!

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 7



…-¿A dónde se dirige? –Consiguió preguntar Daniel, a Carlos, agarrado a su cintura, mientras seguían al taxi.-
- Parece que se dirige a la zona de Goya.
- ¡Para! ¡Para, o nos descubrirá! –Indicó, Daniel, dándole una palmada en la espalda.-

El taxi, se detuvo ante la puerta de un lujoso edificio muy cercano a la “Posada de las Ánimas”, lugar donde Carlos, conoció a las muchachas. Un fornido caballero, con la cabeza rapada, parecía hacer guardia en su puerta, saludando con frialdad a Manuela, que se colaba en su interior si devolverle el saludo.

- ¿Y qué se supone que debemos hacer ahora? –Preguntó, Daniel, desde la esquina de Velazquez.-
- ¿Y tú quieres ser periodista? Vamos, acerquémonos a ver que se cuece…
- Esto es de locos. ¿No ves que ese gorila, con cara de pocos amigos, se interpone en nuestro camino?
- Espérame, enseguida vuelvo.-contestó, Carlos, acelerando el paso.-
- ¿Pero donde vas?
- Tú, espérame.

El portero, o quien quiera que fuera, daba cortos paseos ante la fachada del edificio. Carlos, pensando en que la decisión pudiera ser la mejor aliada ante cualquier movimiento plagado de dudas, se dirigió con paso firme hacia la gigantesca puerta de gruesos cristales y enormes barrotes de bronce, hasta que antes de poner un pie en el primer escalón aquél gigantón saliera a su paso.

- ¿Va a algún sitio, amigo? –preguntó, sacando sus manos de los bolsillos del largo abrigo de color negro, que cubría aquél amasijo de músculos.-
- Verá…me han dado estas señas.-contestó, repasando rápidamente con sus ojos la pila de placas bronceadas, que anunciaban a un número destacado de vecinos de aquél edificio.- Estaba citado con el señor Morente.-añadió, fijando su vista en una de ellas, que destacaba entre todas.- Con el señor, Jacinto Morente, el abogado.
- No son horas de visitar a ningún abogado, ¿no cree?
- Por supuesto. Verá…es conocido de mi familia…

En ese momento, sus argumentos parecieron pasar a un segundo plano. Dos caballeros de buen porte salían del edificio acompañados por dos bellas mujeres cubiertas con abrigos de pieles. El gigantón, dejó de prestar atención a Carlos, y ofreció sus servicios a aquellos dos tipos, que pasaron junto a él sin apenas mirarlo. Entonces, aprovechó y se coló antes de que la puerta se cerrara. Daniel, a lo lejos, no daba crédito al ver su atrevimiento.

Después de que un lujoso automóvil recogiera a aquellas dos parejas, el portero, regresó inquieto a la puerta tras comprobar que Carlos, parecía haberse esfumado. Tomó un walkie de su abrigo y contactó con el interior.

- Estén atentos, posible intruso en el interior.-comunicó.-

Carlos, prefirió coger escaleras arribas antes que tomar el ascensor, para no encontrarse atrapado ante alguna adversidad. Lentamente, fue ascendiendo intentando oír algo fuera de lo normal por aquellos pasillos, y al llegar a la segunda planta, un rumor fue convirtiéndose en un verdadero hervidero de risas y voces. Al fondo del pasillo, la luz de una puerta abierta iluminaba casi hasta la mitad del pasillo, pudiendo permanecer en la penumbra de aquél hueco de escalera.

Un grupo de personas, dando grandes carcajadas, abandonaban aquella vivienda. Encendieron la luz del pasillo, y Carlos, tuvo que retroceder para no ser descubierto. Su corazón, fuera de sí, estaba a punto de estallarle.

- ¿Quién cierra aquí? –Preguntó uno de los caballeros, que quedaba más rezagado mientras los otros, entorno a cuatro, acompañados por un parejo número de señoras, aguardaban a que llegase el ascensor.-
- No se preocupe caballero, los compañeros pasaran a cerrar.-indicó otro hombre, con el mismo atuendo que el portero, según llegó a vislumbrar, Carlos, desde su lugar de vigilancia.-…”

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 8



…Daniel, permanecía vigilando el edificio desde la acera de enfrente, preocupado por su primo. Instantes después, el primer grupo de personas que habían tomado el ascensor salía a la calle haciendo que el portero, los acompañara hasta los vehículos que iban llegando para recogerles. Carlos, continuaba en su puesto intentado descubrir si Manuela, se encontraba entre los últimos en abandonar la vivienda.

- ¡Joder! No se la ve por ningún sitio.-murmuró, con un nudo en la garganta.-
- ¿Y este bomboncito? -bromeó, uno de aquellos señores echando mano al trasero de una de aquellas jóvenes, que aguardaban la llegada del ascensor.-
- Todo a su debido tiempo, caballero.-contestó, la muchacha, apartando su mano entre risas.-
- ¡Es ella! ¡Es la voz de, Manuela! –exclamó ahogándose para sí, Carlos.-

El grupo, montó en el ascensor y Carlos, comenzó a llamar a Daniel, a su teléfono. No había tiempo para que el abandonara el edificio y siguiera los pasos de Manuela, aún burlando al portero.

- Daniel, se dirige a la salida. ¡Síguela!
- ¿Te has vuelto loco? ¡Sal de ahí de una vez! No me gusta nada este rollo…-contestó, Daniel, al Tiempo que Carlos, se maldecía por no haberle dejado las llaves de su moto.-
- Para un taxi, y sigue al próximo coche. Manuela, va con ellos.
- ¡Te he dicho, que no!
- Daniel, haz lo que te digo, en cuanto salga contacto de nuevo contigo y nos reunimos.-repitió, Carlos, colgando su teléfono si dar lugar a ninguna réplica más por parte de Daniel.-

A continuación, al contemplar que la planta quedaba totalmente en silencio, se fue acercando con cautela hacia el piso que habían dejado abierto de par en par. Al llegar, asomó su cabeza, y no encontró a nadie en aquél lujoso salón que presidía la entrada de la vivienda.

La luz del pasillo permanecía apagada, señal de que nadie había vuelto a tomar el ascensor. Carlos, se armó de valor y comenzó a adentrase en el. Botellas de “Don Perignon” y otras buenas y espléndidas bebidas, regaban cualquier rincón de aquella estancia. Copas de buen cristal, abandonadas sobre mesas y aparadores.- ¡Joder, que nivel! –Exclamó, acercándose a otras puertas que permanecían cerradas.- ¡Dios! –añadió, al descubrir numerosas bandejas de platas distribuidas por doquier, en las que montañas de cocaína permanecían junto a diminutos tubos del mismo metal, después de haber sido utilizados.

En esos momentos, la luz del pasillo se encendió, y Carlos, quedó paralizado. Sabía, que no había marcha atrás, si salía podría ser descubierto, y visto lo visto, pocos argumentos, llegaría a encontrar para su defensa. Sin pensarlo dos veces, abrió una de las puertas que permanecían cerradas y se adentró en aquella nueva habitación. Se trataba de un dormitorio de grandes dimensiones cuya cama estaba completamente revuelta, y sobre las mesillas, también quedaban restos de champagne, copas usadas y bandejas de plata, repletas de drogas. Se tiró al suelo, y se escondió debajo de la cama.

- ¿Qué tenemos que hacer? –Dijo la voz de un hombre al otro lado de la puerta.-
- Recoger todo esta mierda antes que nada.-contestó otro, al que reconoció enseguida. Era la misma voz ruda del portero de la entrada.-

Transcurrieron unos minutos hasta que sintió que abrieron la puerta de aquél dormitorio. Su respiración se aceleraba, si aún podía acelerarse más. Comprobó, que los pasos de aquellos dos individuos se iban acercando hasta quedarse parados a los pies de la cama. Ambos, llevaban botas militares con grandes hebillas plateadas…”

Mary dijo...

Pensé que Carlos era un cotilla pero me gusta su debilidad por curiosear y arriesgar..GENIAL¡¡¡

Un bacio

susy dijo...

Vaya tela con Manuela,con razon toma pastillas para dormir...vaya fiestas que se mete....me gusta :)

samara dijo...

si si carlos va a ser qien salve a estas dos pobrecillas de ese mundillo, bueno alomejor ellas están encantadas.....no se no se

asun dijo...

Buenooo, parece que nos metemos en un mundillo de lujos distraidos
Haber como sale Carlos de este entuerto,

Dogoan dijo...

me guuuusssttaaa, Chanel,cocaina y Don perignon,que fiestorros que se pegan estas dos,joder yo quiero...
estas darán mucha guerra, tiempo y lo veremos.

hermano buena mezcla le has metido a esta nueva aventura, genial.

Mike 18 10/4

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 9



Daniel, aún preocupado por la suerte que pudiera correr su primo, siguió sus instrucciones y consiguió que el taxista siguiera sus pautas de ir tras el “Dodge”, negro que iba delante, y en cuyo interior viajaba Manuela, en compañía de otra chica y aquellos dos ricachones.

- ¡Maldita, sea! –Exclamó, uno de los gorilas, haciendo encoger a Carlos, con su voz debajo de la cama.-
- ¿Qué sucede? –preguntó, el que había hecho las veces de portero.-
- Ven, echa un vistazo, “Coco”.-indicó, el primero, señalando hacia el baño.-
- ¡Joder! Ya le dije al “Troncho”, que era la última vez que me ocupaba de limpiarles el culo.-dijo, el portero, maldiciendo a sus superiores.-
- Una lástima…porque la chica estaba bien buena…
- ¡Raúl, no seas crápula! Tapa enseguida a la chica y limpiemos esta pocilga. Tenemos que marcharnos cuanto antes. -ordenó el portero, recriminando su comportamiento.-

Carlos, comenzaba a maldecir el momento en el que había decidido meterse en aquél lío, y tras escuchar aquellos dos “gorilas” conversar, tenía ya bastante clara la situación. Su vida corría peligro si llegaba a ser descubierto, cosa que podría suceder en cuestión de minutos, y por otra parte rezaba porque Daniel, hubiese hecho caso omiso a sus deseos de que siguiera los pasos de Manuela.

- Para, para… ¿No has oído el ascensor? –Preguntó, Raúl.-
- ¡Maldita sea! ¡Joder! –exclamó, “Coco”.- Óyeme, pasemos a la chica al otro piso, antes que nada, y borramos cualquier tipo de prueba.-añadió, suspirando “Coco”, que parecía llevar la voz cantante.-
- Tranquilízate, hombre, “Troncho”, lo tiene todo bien controlado.
- No me fío ni de mi padre. Este asunto esta llegando demasiado lejos. Vale que alguna vez se les vaya de las manos, pero con esta son tres en lo que llevamos de año, y no estoy dispuesto a poner mi culo al servicio de la cárcel por salvarles a ellos el pellejo.-explicó, “Coco”.- No todo se arregla con dinero, Raúl. Tú, eres muy joven y no sabes lo que es pasar por el trullo, pero no caigas en el todo vale, porque te podrían cargar con más de un mochuelo que no te pertenece. Demasiado hacemos ya, coño… Venga vamos, cojamos a esa desgraciada antes de que tengamos alguna sorpresa inesperada.

Para Carlos, que veía como arrastraban el cuerpo de la chica hasta sacarla de la habitación, aquella se convertía en su única oportunidad para salir de aquel agujero en el que se había metido. Sino conseguía huir antes de que regresaran aquellos dos tipos, sería cogido infragante cuando comenzaran a revisar y a limpiar aquel piso intentando no dejar huellas. Aguantando su respiración y el temblor que recorría todo su cuerpo, consiguió salir de debajo de la cama. El silencio era absoluto. Con cuidado, abrió la puerta del dormitorio y comprobó que el salón se encontraba desierto y la puerta del piso cerrada.- ¡Santo Dios, como me hayan dejado encerrado…!.-exclamó, para si, avanzando casi de puntillas hacia la salida.- Por suerte, no habían echado la llave. Suspiró, y tiró del pomo hacia el. El pasillo, se encontraba completamente a oscuras. Cerró tras de si la puerta intentando hacer el mínimo de ruido posible, y comenzó a avanzar a tientas guiado tan solo por las luces parpadeantes de los interruptores de la luz. Debía llegar hasta las escaleras para estar a salvo, no sabía a que piso habían hecho mención aquellos dos matones, y de nuevo pensó que encerrarse en el ascensor era toda una temeridad. El portero, lo reconocería inmediatamente. Acto seguido, volvió a encenderse la luz del pasillo y se sintió desnudo a plena luz del día...”

Mary dijo...

Madre mía¡¡¡¡ en lo que va de año tres....esto esta cogiendo una linea un tanto espinoso.

Me gusta mucho,progresas adecuadamente¡¡¡¡


Un bacio

asun dijo...

!!! REDIOS, PERO DONDE HAS METIDO A ESTE POBRE DESGRACIADO??? Salmorelli,no le dejes mucho tiempo en la oscuridad, vayamos a tener un disgusto ,

Dogoan dijo...

las malas compañias nunca traen nada bueno, vaya dos perlas estas y anda que los dos pringaos ya les vale...
les va a caer un marrón de narices.

Hmno un abrazo.

susy dijo...

Vaya tela en que lio se han metido estos dos....venga,venga que me enfrio

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 10


…Un rumor, se escuchaba de fondo, quizás desde el piso superior, y la maquinaria del ascensor comenzó a vencer aquel inquietante silencio que había precedido instantes antes. No había más tiempo que perder, así que echó a correr para vencer la distancia que quedaba desde el ascensor hasta el hueco de las escaleras, y al fin se puso a salvo de aquella tesitura, comprobando, al asomar ligeramente su cabeza, que aquellos dos secuaces volvían a dirigirse de nuevo, allá en la lejanía, hacia la escena del crimen.

Daniel, mandó a parar el taxi a unos cien metros de donde habían aparcado los lujosos vehículos, agradeciendo la ayuda que le había mostrado el taxista. De ellos bajaron todos sus ocupantes y se dirigieron hacia la entrada de un vistoso chalet, mientras que los conductores quedaban haciendo guardia junto a los coches. Poco podía hacer por el momento, si no quería llegar a ser descubierto, pero un nuevo vehículo hacía su aparición, aparcando tras los anteriores. No podía creerlo, de el bajaron dos nuevas señoritas, una aproximadamente de la misma edad que Manuela, y otra algo más madura, pero el caballero que acababa de apearse, pese a la lejanía y la penumbra reinante bajo aquellos altos árboles, no era otro que su mismo padre. Su cojera y su porte resultaban inconfundibles para el, pese a toda adversidad.

Carlos, no lo pensó dos veces y bajó las escaleras a toda prisa. No había tiempo que perder. Debía abandonar aquel edificio cuanto antes y avisar a Daniel, de que abandonara aquella estúpida aventura en la que él mismo lo había inmiscuido. Tendría que avisarlo, sino resultaba ya, demasiado tarde.

Al llegar al último rellano, antes de alcanzar el hall de entrada, Carlos, comprobó que el ascensor permanecía aún en los pisos superiores. Era el momento de correr hacia la calle. Tras buscar el interruptor, que abriera el cancel, bajó los últimos escalones que lo separaban de la salida. El ascensor, inició de nuevo su marcha, al tiempo que un matrimonio de edad avanzada, abría la puerta desde el exterior.

- ¡Disculpen! –Exclamó, Carlos, apartándolos de su camino, consiguiendo tomar al fin una bocanada de aire fresco del exterior, sin reparar en casi tira al suelo a aquella pareja de ancianos.-
- ¡Mal educado! –gritó la señora, al tiempo que se habrían las puertas del ascensor y salían de el, “Coco” y Raúl.-
- ¿Qué sucede señora? –preguntó, Raúl, al ver como continuaba despotricando la señora.-
- Un niñato, que salía como alma que lleva al diablo…y casi nos arrolla.-contestó, el caballero.-
- ¿Un niñato? Corre, “Coco”, ve a ver.-indicó, Raúl.-

“Coco”, corrió a la puerta de la calle, desde donde aún pudo divisar como Carlos, corría a toda velocidad perdiéndose en busca de alcanzar la avenida.

- ¿Quién es?
- ¡No lo se maldita sea!, pero no me gusta nada.-contestó, resoplando “Coco”.- Esta noche perdí de vista a un niñato como ese…y mas nos vale que no este al tanto de nada…
- Venga vamos, no hay tiempo que perder.-indicó, Raúl.- olvida a ese mocoso. Tenemos cosas más importantes que hacer…”

Mary dijo...

este capitulo se ha hecho de rogar un poquito pero a valido la pena...¿ El padre?..va Maestro no nos quites el caramelito por favo¡¡¡¡¡

Un bacio.

asun dijo...

El pobre chico se habra quedado de piedra al ver a su padre por esos ambientes y despues de la tension que ha vivido

asun dijo...

MAÑICO, HABER ESTA JOTA QUE NO CORRE ,¿ ESTAS PERDIDO EN EL DESVAN?

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 11



…Daniel, sigilosamente, rodeó la manzana intentando burlar la vigilancia de aquellos hombres para acercarse a la casa en la que había visto entrar a Manuela y a su padre. Aquella lujosa urbanización contaba también con su propia vigilancia interna a cargo de una reputada compañía de seguridad, cuyo automóvil patrulla acababa de detenerse junto a los vehículos de aquellos delincuentes.

Alcanzando la parte trasera, y contorsionando su cuerpo, consiguió adentrarse a través de unos gigantescos setos al interior de los jardines que rodeaban el chalet. Segundos después la vibración de su teléfono móvil, lo sobresaltaba mientras se acercaba lentamente hacia la casa.

- ¿Dónde diablos estás? –Masculló en voz baja.-
- ¿Y tú? Olvídate de lo que te dije y vuelve a casa. Es peligroso -le ordenó, Carlos.-
- ¡Vete al cuerno! Ve tú. Allí nos veremos.
- ¡Daniel! ¡Daniel!

Daniel, desconectó su teléfono y continúo avanzando hacia la casa. Los jardines, se hallaban completamente a oscuras facilitando su incursión, y tan solo el rumor de unas grandes risotadas provenientes del chalet, acompañaban cada uno de sus pasos. Pasos, que daba lentamente sobre el frondoso césped intentando no hacer ruido. Aquél silencio le angustiaba pensando lo fácil que había resultado colarse en el interior de aquél recinto.

El aspecto de la parcela era de un total abandono. La maleza se entremezclaba en alturas, y a su derecha dejaba el reflejo de la luna sobre el lodazal de lo que debiera haber sido una hermosa piscina tiempo atrás.

Al fin ganó la fachada trasera de aquella enorme casa, acercándose prácticamente a gatas hasta ella. Allí, solo una majestuosa escalera de mármol que daba paso a una puerta que parecía cerrada desde hacía años, a juzgar por la suciedad, le hizo dar un rodeo hasta encontrarse justo debajo de uno de los inmensos ventanales del lateral izquierdo de la misma.

El ruido procedente del interior ganaba en intensidad, mientras que Daniel, se incorporaba poco a poco intentando vencer el nerviosismo que le invadía. Tras uno de los enormes macetones que rodeaba la casa, se refugió, apoyando su espalda contra la fachada, y apartando cuidadosamente algunas de sus ramas consiguió divisar lo que estaba sucediendo en aquél lugar. Solo unos finos visillos, guardaban débilmente la intimidad de aquella bacanal.

Aquella planta baja, completamente diáfana, poco tenía que ver con el abandono exterior de la casa. El lujo, rezumaba por sus cuatro paredes, y en aquél gigantesco salón todo el mundo paseaba desnudo, a excepción de un par de sirvientes, que elegantemente vestidos permanecían atentos tras una maravillosa barra de madera tallada sirviendo bebidas y aperitivos a los invitados…”

Mary dijo...

Maestro tal y como lo describes me pone los pelos de punta a demás de dejarme intrigadisima con lo que se va a encontrar en ese lugar.

Vale vale¡¡¡¡¡ sigue por favor.

Un bacio.

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 12



Daniel, no podía dar crédito a lo que presenciaba desde su improvisado escondite. En aquella casa, la inmoralidad y la lujuria se apoderaban de cada uno de sus rincones. Aquél grupo de personas allí reunidos, se entregaban a la carne sin pudor alguno. Sin ninguna regla establecida. Hombres y mujeres se acoplaban desperdigados por entre los innumerables sofás y lujosas alfombras de la estancia, protagonizando una monumental orgía.

El muchacho, inquieto, no acertaba a encontrar entre aquella muchedumbre desnuda ni a su padre, ni a Manuela, mientras que las escandalosas risas, fruto del alcohol, las drogas y la desinhibición absoluta que se vivía allí, llegaban a cubrir la suavidad de la música clásica que sonaba de fondo. Hasta que al fin, divisó a Manuela. La chica, parecía acercarse, como si de un desfile se tratase, hacia la barra sujetando una copa vacía de champagne. Sus curvas, y su pelo suelto hicieron que Daniel, recordase por un momento los soeces comentarios de Carlos, hacia ella. Al llegar hasta donde se encontraba el camarero, antes de que pudiera pedir otra copa, dos señores maduros se acercaron a ella por detrás, y sin que mediaran palabra alguna, hicieron que se arrodillase ante ellos. Manuela, sumisa, atendió al gesto recogiendo sus cabellos con una mano y acercó su boca sin dudarlo un momento hasta conseguir la erección de ambos, tras afanarse virtuosamente en dicha tarea. Pocos después, ambos señores se alejaron de ella hasta acercarse a uno de los sofás disponibles, y se enredaron en diversos juegos eróticos dando grandes carcajadas. Manuela, como una zombi y con la copa nuevamente llena, continuó vagando por el salón sin dejar de ser toqueteada o besada por los hombres y mujeres, que se topaban con ella.

De pronto, Daniel, tuvo que dar un salto hacia atrás para no se descubierto. La silueta de una chica se topaba violentamente contra el ventanal, mientras que un hombre bastante musculoso, arremetía vigorosamente contra su trasero. Sus profundos alaridos de dolor, contrastaban absurdamente con sus lamentos de placer y la cara de felicidad que mostraba aquella joven, debido a lo colocada que se hallaba. Una chica, que a juzgar por su aspecto debería andar rozando los diecisiete o dieciocho años.

- ¡Esto es de locos! Debería ir corriendo a avisar a la policía.-masculló, Daniel.-

Instantes después, aquél fortachón terminaba de saciarse con la muchacha. La giró hacia el. La besó, y tras pasar su lengua por todo su rostro, la empujó contra el suelo quitándosela de encima. Fue entonces, cuando volvió a quedarse abierta la visibilidad de la sala ante Daniel, que descubría lleno de ira el lugar en el que se encontraba ubicado su padre en aquella fiesta.

Tendido sobre una chaise longe, la señora madura que le había acompañado a su llegada permanecía inclinada entre sus piernas lamiendo ansiosamente su pene, mientras que otra chica mucho más joven permanecía en cuclillas sobre él dejándose lamer al tiempo que le propinaba unas fuertes bofetadas…”

Mary dijo...

No voy a preguntar que clase de lugar es ese,seria de tontas, pero ¿Manuela?,que clase de situación le lleva a mezclarse en ese ambiente????,no creo que sea solo vicio y placer....

Esto promete Maestro¡¡¡¡

asun dijo...

Pobre Daniel, no lo tiene que estar pasando nada bien el pobre chico,

susy dijo...

Madre mia como se esta poniendo esto.Daniel estara alucinando con su padre que fuerte..

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 13



…Una lágrima resbaló por la mejilla de Daniel, sin que pudiera reprimirla. Odiaba a su padre con toda su alma. Sabía que éste había hecho sufrir a su madre, y que está tomo la decisión de huir de su lado sin impórtale ni tan siquiera su inmensa fortuna. Quizás habría querido llevarlo con ella, y quizás su padre se encargara de frustrar sus intenciones. Durante años la había culpado de dejarlo abandonado en manos de ese ogro, que solo pensaba en su nueva esposa y sus empresas sin importarle él, pero ahora, tras ver aquellas imágenes parecía comprenderla mejor que nunca.

Mientras cerraba sus ojos, queriendo borrarlas de su mente, un nuevo vehículo había llegado a las inmediaciones de la casa. Se agachó, y mantuvo la respiración tras los ramajes de aquel macetón. Hacia la entrada principal se dirigían cuatro agentes de policía.

- ¡Bien! A ver si pagan por sus actos estos degenerados.-murmuró, respirando con felicidad.-

Pero para su sorpresa, a través del ventanal, comprobó que al abrirles la puerta fueron recibidos entre saludos y grades vítores por los allí presentes, y aquello acababa con sus intenciones de ir a denunciar lo que se cocía en el interior de aquél chalet. Pronto corrieron varias chicas al encuentro ansiosas por desnudarlos y sumarlos a la fiesta.

Decepcionado, pensó que poco más podría hacer en aquél lugar. Lo mejor sería salir de allí, sin que llegaran a descubrirlo y volver cuanto antes a casa para reunirse con Carlos. No sabía si sería capaz de contarle lo que había vivido. Pero, cuando se disponía a marcharse se encendieron las luces exteriores del jardín.

Paralizado, miró en todas direcciones, pero no vio a nadie. Volvió a asomarse al interior de la vivienda y descubrió que toda aquella marea humana parecía comenzar a desfilar hacia el exterior de la casa. Se tumbó sobre el terreno, frío y húmedo, y se cubrió con la ayuda de la hojarasca y la maleza. No tenía salida.

Todos desfilaron en la lejanía, sin importarles las bajas temperaturas ni permanecer de aquella guisa a la intemperie, y formando un enorme coro alrededor de una enorme mesa comenzaron a jalearse entre risas y dando grandes voces. Al instante, los dos camareros hicieron su aparición escoltando a una joven de poco más de catorce o quince años, ataviada con un fino camisón, y que parecía encontrarse completamente drogada. La auparon hasta la mesa, y entonces uno de aquellos ridículos señores desnudos tomaba la palabra, al tiempo que se hacía un silencio sepulcral.

- ¡A ver señores! ¡Comiencen la puja! –gritó.-
- ¿De donde arrancamos? –preguntó, su padre.-
- ¡Tres mil euros! ¿Quién da más?
- ¿Un poco alto, no crees? –preguntó, otro señor.-
- ¿Alto…? Virgen, joven, bella…
- ¡déjanosla ver! –gritó, su padre.-

Ante el gesto del que parecía llevar la voz cantante, Manuela, subió también a la mesa y comenzó a bajar lentamente el camisón que cubría a la muchacha, dejando sus hombros y pechos al descubierto. A continuación, se colocaba ante ella y comenzaba a besar su cuello para continuar lamiendo sus pezones hasta excitarla de tal manera, que comenzó a contonearse levantando la expectación de toda la concurrencia.

- ¡Tres mil quinientos! –Gritó, una voz desde la parte más alejada.-…”

Mary dijo...

Pobre Daniel, juzgo a su madre sin saber la historia real y ahora se da cuenta la clase de persona que tiene como padre,QUE FUERTE¡¡¡¡

Progresas adecuadamente Maestro¡¡¡

Un bacio.

Dogoan dijo...

Hermano, un giro sorprendente le has dado a tus relatos con el Desván, Sectarios del Sexo,ahí es ná,complicado tema pero, tenias razón ahora si comienza a tener espectativas esta trama.
al pringao este ya mismo lo veo dentro, que no le pase ná se va a quedar como un pajarito.

Genial a seguirlo con detenimiento.

un abrazo hermano.

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 14



…La puja continuo creciendo de manera vertiginosa ante el estupor de Daniel, que avergonzado comprobaba como su padre tomaba la iniciativa una y otra vez, mientras todos los allí congregados, incluidas las fuerzas del orden, contemplaban excitados el número lésbico protagonizado por Manuela, y aquella joven indefensa que completamente desnuda continuaba haciendo esfuerzos por mantenerse en pie sobre la mesa. Aquello, no hacía más que encender las carteras de los presentes, que ansiaban ferozmente tener la posibilidad de desflorar el tan ansiado premio.

- ¡Seis mil!

Aquella voz también le resultó familiar. Intentando no hacer ruido por entre aquél follaje que lo cubría, Daniel, elevó su cabeza hasta distinguir entre aquella marea humana a quien había ofrecido los seis mil euros. Aquél sujeto, no era otra persona que Fermín Saavedra, su profesor de “Comunicación política y pública”. El mismo que tenía fijación en que no terminase su carrera, aunque fuese su asignatura la que se encargara de ello. Saavedra, había subido de una sola vez mil quinientos euros, lo que hizo que el rumor de los allí presentes se convirtiera en desconcierto para su propio padre y otros personajes que se estaban mostrando muy interesados en llevarse aquél “botín”.

- ¡Nadie dá más! –Gritó, el que hacía las veces de organizador.- ¡Seis mil, a la una! ¡Seis mil, a las dos! ¡Y seis mil, a las tres! ¡Adjudicada!
- ¡Corre a por ella, Saavedra! –gritó uno de los corruptos policías.-
- ¡Sí corre o te la desvirgan con la lengua! –Gritó, otro, viendo como la joven contorsionaba de placer, mientras Manuela, la había sentado sobre su boca.-

A Daniel, tras comprobar aquél acto, no le cabía la menor duda de que Fermín Saavedra, tenía mucho que ver con su padre. Estaba completamente seguro de que ambos estaban al complot para que él desistiera en terminar la carrera de periodismo, y se dedicara a estudiar Empresariales, que es lo que real y egoístamente deseaba su padre.

- ¡Bueno, señores, vayamos dentro y continuemos con la fiesta!

Todos, a excepción de Fermín Saavedra, que retuvo junto a él a Mañuela y a la joven recién subastada entraron de nuevo en la casa formando una gran algarabía.

- ¡Apagad las luces, coño! –Gritó, Saavedra, subiéndose a la mesa con dificultad.-
- ¡Cuando termines, pásala, Saavedra! –Gritó, un hombre bastante subido de peso que apenas daba dos pasos sin asfixiarse.-
- ¡Venga, Rueda, si no puedes ni con la panza! –Contestó, otro, haciendo saltar las carcajadas de los demás.-

Obedientemente, los empleados de la casona dejaron de nuevo el jardín en penumbra, lo que facilitaría de nuevo la huída de Daniel. Ahora, tan solo tendría que burlar el lamentable trío que conformaban aquellas dos chicas y el profesor, que en las condiciones en que se encontraban poco podrían hacer por retenerlo. Pero, sin poder evitarlo, aquella imagen de Manuela, y la joven, enredadas en todo tipo de juegos amorosos, lo había excitado tanto, que decidió continuar allí escondido sin poder apartar la vista aquella escena…”

Mary dijo...

Ahora Daniel ya tiene motivos más que suficientes para terminar la carrera SI o SI....Me gustaría saber con que cara va a mirar a Manuela cuando la vuelva a ver, valla embolao¡¡¡¡¡

Un bacio.

salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 15



…Manuela, bajó del entarimado y volvió a perderse hacia el interior de la casa, mientras que el profesor, comenzó a babear sobre aquella joven desprotegida de su propia persona, obligada a someterse a las vejaciones de aquél patético individuo. Daniel, a punto estuvo de saltar sobre él para librarla de sus fauces, cuando, con la misma habilidad que un felino, alguien lo agarró por el hombro.

- ¿Te gusta mirar, Daniel?
- ¡Manuela! –gritó, ahogando aquel tremendo susto, mientras el profesor Rueda, levantaba su cabeza de entre la piernas de su presa alarmado por los ruidos.-
- Psssh, calla. Calla, si quieres salir vivo de aquí.-indicó, Manuela, tapando su boca, al tiempo que el profesor volvía a emplearse en su tarea.-
- ¡Maldita hija de puta…! –masculló, Daniel.-
- ¡Eh, no me hables así! –le recriminó, Manuela.- ¿Qué demonios haces tú aquí? ¿Te invité yo? –preguntó, sin articular a duras penas cada una de sus preguntas a consecuencia de los estupefacientes.- ¡Ven, sígueme! –añadió, tomándole la mano.-
- ¡Ni lo pienses! Enseguida me marcho de este lugar.
- De eso nada, muñeco. Harás lo que te digo, sino quieres que comience a gritar como una loca. Tú, eliges.
- ¿Qué es lo quieres?
- No seas bobo Daniel, acompáñame.-insistió, la modelo.-

Manuela, agarró de nuevo su mano y lo ayudó a incorporarse de detrás de aquél matorral que lo había cobijado. A continuación, haciendo caso omiso de las voces que el profesor Rueda, emitía buscando el lugar de donde procedían aquellos ruidos, lo hizo pasar a una pequeña cabaña de madera poco espaciosa, que servía para proteger el mobiliario de la piscina durante los meses de invierno.

- ¿Qué quieres, Manuela? ¿Por qué no me dejas marchar? Me iré y olvidaré todo lo que he visto en este repugnante lugar…
- Psssh, calla Daniel, calla.-contestó, sin apenas poderse mantener en pie rozando delicadamente sus labios con el dedo índice.-

Acto seguido, lo besó, y comenzó a resbalar su lengua por su cuello al tiempo que desabrochaba la cremallera de su cazadora y deslizaba su mano izquierda por entre su entrepierna.

- Harás lo que te digo y todo saldrá bien.- susurró a su oído.-

Daniel, se dejó arrastrar por la pasión que desataba Manuela, en cada uno de sus movimientos, y sin oponer resistencia, comenzó a besarla agarrándola con firmeza por las caderas. En ese momento, Manuela, lo apartó con brusquedad de ella, y como una fiera se dejó caer de rodillas ante él, buscando con cierta torpeza la forma de despojarlo de sus pantalones. Daniel, se despojó de su ropa gimiendo de placer, queriendo arrancarle la túnica que la cubría, para ver su desnudez total y echarse encima de ella, pera ésta, fuera de sí, levantó su mirada hacia él, y relamiéndose los labios le dijo;

- Espera, espera…yo soy tu dueña.

Se puso en pie, y lo empujó a que se arrodillase ante ella. Se dejó caer sobre una pila de mesas situadas detrás de ella, y se abrió de piernas ante él…”

Mary dijo...

Esta claro que Manuela no se anda con tonterías, creo que Daniel esta muerto de placer y miedo¡¡¡¡¡

Un bacio

Dogoan dijo...

esta muchacha tiene las ideas muy claras y no va a permitir que le fastidien este ritmo de vida como asi se lo va a hacer entender al pringaillo de Daniel, ¿haber si lo entiende?

asun dijo...

Parece que Daniel ha sucumbido tambien a ese ambiente de lujuria y se va a dejar arrastrar olvidandose pronto de las escenas que acaba de ver y que le habian escandalizado, en cuanto le han pillado de la bragueta se le ha nublado el sentido, que lastima

susy dijo...

BUENO COMO SE ESTA PONIENDO LAS COSAS.PUES VALLA CON DANIEL,COMO NO ESPABILE MANUELA SE LO LLEVA AL HUERTO.

susy dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
salmorelli dijo...

“CAPITULO Nº 16



...La pasión desatada en aquella casetilla, contaminó el ambiente unido al persuasivo perfume que envolvía a la joven, arrastrando a ambos protagonistas hasta alcanzar el clímax una vez tras otra. Manuela, poseída por la falsa lujuria impuesta por el alcohol y las drogas, obligó a Daniel, a consumir con el pretexto de alcanzar un goce mayor. El sudo, las risas y el éxtasis mutuo los empujó horas después, completamente exhaustos, hacia un profundo sueño del que la chica nunca más despertó.


La luz de adueñó con rapidez de aquél pequeño habitáculo, que horas antes había sucumbido a la fogosidad de la pareja. Daniel, abrió con dificultad sus ojos al tiempo que se llevaba las manos impulsivamente a la cabeza para intentar paliar el terrible dolor de cabeza que le asolaba. Junto a él, reposaba el cuerpo sin vida de Manuela.

- ¡Manuela! –gritó, en voz baja intentando despertarla, sintiendo como la frialdad de su cuerpo calaba en sus manos para su desesperación.- ¡Manuela!

Al girar su cuerpo, comprobó que desde su nariz se dibujaban hasta resbalar por su cuello dos hilachas de sangre. Sus ojos, permanecían abiertos, y la tersura de su cuerpo desnudo se había vuelto mortecina, sin que hubiese perdido esa belleza que lo había vuelto completamente loco horas antes.

- ¡Dios Santo! –exclamó, cerrando sus párpados e intentando cubrir su cuerpo.-

Tambaleándose, consiguió ponerse en pie y buscó la ventana preso de los nervios. Los primeros rayos de sol, cegaron su inquietud y a punto estuvo de perder el conocimiento. Su cabeza, parecía a punto de estallar, mientras el exterior permanecía desierto y la soledad del silencio batallaba en cubrir el leve trino de los pájaros.

Nuevamente se llevó las manos a la cabeza. No sabía que tipo de sustancias hubo ingerido junto a Manuela, pero el resultado era muy superior al de una simple resaca. Como buenamente pudo recogió toda su ropa dispersa por entre mesas y sillas, y consiguió vestirse. Sus manos temblaban, y sus piernas flaqueaban a cada paso que daba, pero al fin consiguió llegar hasta la salida de aquél conjunto de maderas, que se hubo convertido en cómplice de su trágico desmán.

Arrastrando su propia cobardía, consiguió alcanzar las ventanas del caserón. Tras sus cristaleras, nada quedaba de la bacanal que se había vivido la noche antes. Todo estaba en perfecto orden, y nadie quedaba ya entre sus muros. Parecía como si nunca hubiera acontecido aquella fiesta libertina en el que todo parecía valer. Todo parecía convertirse en el reflejo de un mal sueño con el peor de los finales. Sus piernas se quebraron, y cayó al suelo perdiendo el conocimiento. Horas después volvió a despertar. Se había disipado su consciencia del tiempo. Se incorporó, y corrió de nuevo hacia la casetilla. El cuerpo de Manuela, había desparecido…”

Mary dijo...

¿ Manuela ,muerta y su cuerpo desaparecido¡¡¡¡¡¡¡ ??????

Vale, ya estoy en situación, aunque tardes de capitulo en capitulo sabes hacer que retomemos la intriga desde el segundo nº1, GENIAL, ME ENCANTA¡¡¡

Un bacio.

susy dijo...

Madre mía Manuela muerta..y Laura todavía sigue en Madrid...que raro..

Dogoan dijo...

¡¡hala, di que si hermano, ya te has cargado a la primera, una mala noche la tiene cualquiera, es lo que tiene estos excesos, que lastima de criatura, no veas el pringaillo este por lo que va a tener que pasar.

Me gusta.

asun dijo...

Asi es, en una mala noche pierde la cabeza y al cadaver, donde vamos a ir a parar,